La cadena de suministro farmacéutica enfrenta serios desafíos como la falsificación de medicamentos y las interrupciones logísticas, que ponen en riesgo la seguridad de los pacientes a nivel mundial. La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que un porcentaje significativo de productos médicos en circulación en algunos países son falsificados o de calidad inferior. Para combatir estos problemas, la industria está adoptando tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial (IA), blockchain y la automatización, junto con etiquetas inteligentes y sistemas de rastreo digital.

Tecnologías específicas como blockchain crean registros inmutables para garantizar la autenticidad y facilitar el seguimiento de los lotes. La IA ayuda a predecir y detectar patrones sospechosos y a optimizar la logística para entregas oportunas. La automatización, la identificación por radiofrecuencia (RFID) y los códigos QR avanzados también mejoran el control, la verificación de autenticidad y la eficiencia logística. A pesar de sus ventajas, la implementación de estas tecnologías enfrenta barreras como los altos costos, la falta de estándares globales y la resistencia al cambio, además de preocupaciones éticas como el sesgo algorítmico, la privacidad de los datos y el acceso equitativo a los medicamentos.