La compañía farmacéutica Merck ha reforzado su apuesta por el sector de la electrónica, especialmente en el mercado de semiconductores, impulsada por la creciente demanda de chips de alto rendimiento para la inteligencia artificial. Durante su Capital Markets Day 2024, Merck elevó sus previsiones de crecimiento orgánico anual para esta división al 5-9%, reflejando su consolidación como un actor clave en semiconductores y soluciones de visualización. La empresa alemana se centra en la innovación en ciencia de materiales, un factor crucial en la actual "era de los materiales" de la industria de semiconductores.

Merck está desarrollando soluciones innovadoras para crear chips más pequeños, potentes y eficientes, abordando los límites del escalado tradicional con avances en películas delgadas y deposición atómica. Destaca el desarrollo de la deposición precisa de películas delgadas, esencial para transistores e interconexiones en chips complejos. La compañía también está impulsando el uso del molibdeno como alternativa al tungsteno en chips de memoria, a pesar de los desafíos en su deposición, para los cuales Merck ha desarrollado sistemas robustos. Además, la adquisición de Unity-SC en 2024 fortalece su posición en metrología e inspección para la fabricación de chips avanzados para IA. Otro avance significativo es el ensamblaje dirigido por sí mismo (DSA), que promete reducir la complejidad y los costes de producción. Estas estrategias consolidan el liderazgo de Merck en el sector, impulsando el desarrollo de la próxima generación de chips.