El Gobierno español ha destinado 993 millones de euros desde 2018 a la investigación contra el cáncer, la mayor inversión en la historia del país, con el objetivo de desarrollar tratamientos más precisos y accesibles. A esta financiación se suman iniciativas del ISCIII, la AEI, el CDTI y el CSIC, que han impulsado cientos de proyectos de innovación en terapias avanzadas, incluyendo la hadronterapia y nuevas terapias génicas. Gracias a este esfuerzo, la financiación en investigación oncológica ha crecido un 157% desde 2018.

Además de la inversión pública, han surgido numerosas campañas de ayuda civil a pacientes que enfrentan tratamientos costosos o buscan alternativas fuera del sistema sanitario tradicional. Historias como la de Alai, Catalina y Pedro Manuel, pacientes que luchan contra diferentes tipos de cáncer, han movilizado a la sociedad a través de plataformas de recaudación de fondos, demostrando el impacto de la solidaridad en la mejora de la calidad de vida y el acceso a tratamientos. Mientras las cifras de casos de cáncer siguen aumentando, la combinación de inversión científica y apoyo comunitario se vuelve clave en la lucha contra esta enfermedad.