El nuevo sistema, desarrollado por Roche, permanece implantado en el brazo del paciente durante 6 meses, mide el nivel de azúcar de forma continua y permite visualizar los valores en tiempo real desde un Smartphone.
Roche ha revolucionado la gestión del control de la diabetes en España lanzando un dispositivo implantable que permite medir la glucosa de forma continua durante 6 meses. Hasta el momento, los medidores continuos requerían un cambio de sensor quincenal y se insertaban debajo de la piel a través de un filamento flexible.
El nuevo sistema está formado por tres elementos interconectados: un sensor de glucosa, un transmisor inteligente y una aplicación móvil. El sensor es una pequeña cápsula, del tamaño de una píldora, que se implanta en la parte superior del brazo. Sobre el sensor se coloca el transmisor, que es recargable y resistente al agua. Desde allí se envían los datos a una aplicación instalada en el smartphone del usuario que permite ver las lecturas en tiempo real.