Los expertos que se han reunido en el I Foro Fabry, organizado por Shire, han puesto de manifiesto que el inicio de tratamiento temprano de la enfermedad de Fabry puede conllevar "beneficios y detener en mayor medida" la evolución natural de la enfermedad.
En concreto, esta enfermedad es un trastorno hereditario poco común de depósito lisosomal que afecta aproximadamente a entre 1 por cada 50.000 y 1 por cada 117.000 recién nacidos en la población general, según ha informado la empresa.
"En muchos casos, comenzar a tratar la enfermedad de forma temprana puede conllevar beneficios y un desarrollo más favorable de la enfermedad", ha afirmado el director clínico de enfermedades minoritarias en Campus Vall d'Hebron, Barcelona, y moderador del encuentro, Guillem Pintos.
Así, ha continuado explicando que el inicio del tratamiento en la juventud o en periodo de adulto joven se asocia a una mayor atenuación de la progresión de las alteraciones renales y cardiacas secundarias a la enfermedad de Fabry.
"Tenemos, por tanto, ejemplos de pacientes que iniciaron el tratamiento en la época pediátrica y que al cabo de 10 o más años no han desarrollado la forma completa de la enfermedad", ha manifestado.